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miércoles, 30 de junio de 2010

2012 y el último día de tu vida

Por.José de Segovia, España*
¿Qué harías hoy, si fuera el último día de tu vida? Esta es la pregunta que muchos predicadores hacen desde hace siglos, pero es también la cuestión en torno a la que gira el drama de la película 2012, que acaba de salir en DVD. El alemán Roland Emmerich se ha convertido en el maestro del nuevo cine catastrófico de Hollywood, cuyos desastres alcanzan ya todo el mundo. El director de Godzilla, Independence Day o El día de mañana se inspira ahora en una falsa profecía maya para volver a hacer lo que más le gusta: destruir el planeta Tierra.
2012 trata una temática especialmente popular en el cine americano –a la que es muy aficionado el público evangélico-..Es el llamado cine apocalíptico, un curioso subgénero de las películas de catástrofes, que en su vertiente secular parece elevar a un prisma metafórico los miedos y frustraciones de la sociedad contemporánea, pero que en su versión cristiana pretende visualizar con todo tipo de detalles cierta escatología evangélica, que se recrea en la figura del Anticristo, la destrucción del Armagedón o la perplejidad del Arrebatamiento.
A la inquietud que ha producido la destrucción de las Torres Gemelas, se han unido ahora los efectos de la crisis económica, para aumentar aún más la conciencia de vulnerabilidad del ciudadano medio norteamericano. Ni siquiera la llegada a la presidencia de un símbolo de esperanza como Barack Obama (claramente evocado por Danny Glover en la película 2012), parece haber resucitado el sueño americano, que se ve ahora construido sobre los cimientos podridos de una creencia que ve al ser humano como el centro del universo, mientras se juega el futuro con hipotecas de alto riesgo.
LA ESTRATEGÍA DEL MIEDO
Como bien observa el crítico de la revista Dirigido Por, Tonio Alarcón, el relato apocalíptico de 2012 se basa en el miedo a la muerte intrínseco en todo ser humano. Es en cierto sentido un cuento ejemplarizante que intenta ser un vehículo para remover conciencias, no del desastre ecológico –como algunos resúmenes de prensa dan falsamente la impresión, ya que la película no hace ninguna referencia al cambio climático–, sino a algo tan cercano como el trauma que producen tantas familias rotas por la incomprensión y el egoísmo.
La referencia astrológica al calendario maya le da un cierto tono trascendente a la historia. Se basa en la absurda interpretación de algunos libros esotéricos actuales, que pretenden que la cultura que florece en el Yucatán mexicano y otras partes de Centroamérica del 300 al 900 antes de Cristo, predijo el fin del mundo para el 21 de diciembre del 2012. Obvia decir que la idea no es sólo disparatada, sino carente de todo rigor astronómico y arqueológico. Los mayas no anunciaron el fin del mundo, como tampoco supieron cuando llegaría Cortés para destruir su civilización milenaria.
Lo importante es que según esta idea de Nueva Era, “el último día no significará la llegada de ninguna calamidad”, sino “una completa nueva conciencia cósmica y una transición espiritual hacia una nueva civilización”, según uno de los autores esotéricos que apuntan a esta fecha. La destrucción traerá por lo tanto un saneamiento moral, que como un nuevo Diluvio anuncia un nuevo comienzo.
LA RELIGIÓN DESTRUÍDA
La visión esotérica se une así al lenguaje bíblico en 2012, que llama a un personaje Noé y a las naves arcas, en una clara referencia al suceso bíblico conocido en casi todas las civilizaciones como un gran Diluvio, que adquiere una dimensión universal. El autor de esta película no es sin embargo alguien conocido por su fe. De hecho, lo único que se sabe de él en Hollywood es que es homosexual (aunque como Bryan Singer, no tiene personajes gay, ya que según él, “las películas no tienen nada que ver con la sexualidad”).
Lo que está, es “contra las religiones organizadas, contra las iglesias”. Porque según él, “¿para qué hay que ir a una iglesia a orar?”. De hecho la destrucción del Vaticano en su película, dice con evidente tono irónico, trae “el mensaje que si tienes que hablar con Dios, no lo hagas enfrente de una iglesia, porque se te puede caer encima”. Aunque por sugerencia del guionista, Emmerich no se atreve a mostrar la demolición de la Caaba (para evitar una posible fatwa), pero el Cristo del Corcovado en Río corre peor suerte…
¿Cómo entender entonces tantas referencias bíblicas? El presidente afroamericano (interpretado por Danny Glover), intenta hacer una oración ecuménica por televisión – ante la inminente destrucción –, que cree “refleja toda fe y credo”. Comienza entonces las palabras del Salmo 23, que corta antes de acabar la primera línea (¿cuántos sabrán hoy cómo continúa y de dónde viene?), aunque el personaje de Ejiofor (el asesor científico del presidente, Adrian Helmsley) cita extensamente la pobre novela de Jackson Curtis (el protagonista, cuyas iníciales no sólo coinciden con Jesucristo, sino con el actor John Cusack, que lo interpreta bastante correctamente). ¿Dónde está entonces su trascendencia?
EL GRAN FUTURO DEL PLANETA TIERRA
Aunque películas como 2012 dan la impresión que la esperanza de este mundo está en un lugar como el Tíbet (donde se construyen las naves que permiten que uno de los monjes esté entre los supervivientes), el budismo no anuncia ningún futuro para el planeta Tierra. Es en la doctrina bíblica de la Creación donde la Revelación nos sumerge desde un principio en la materialidad. Basta con abrir la primera página de la Escritura (En el principio creó Dios los cielos y la tierra, Génesis 1:1) y compararla con la última (Apocalipsis 21:1, He aquí vi nuevos cielos y nueva tierra), para ver la importancia de la Creación en el mensaje bíblico.
El cristianismo evangélico parece sin embargo a veces haber perdido la perspectiva bíblica en un mensaje espiritualista –que desprecia la realidad física y material–, o la discusión sobre los orígenes –contra el evolucionismo–. La teología moderna protestante no se caracterizó tampoco por su interés por la Creación –como demuestra Moltmann–, que ve como un mero escenario para los hechos de Dios en la Historia. La Creación es sin embargo algo más que un decorado para la obra de salvación. Es central al propósito de Dios que dice: He aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra (Isaías 65:17).
Ante el miedo de aquellos que temen una hecatombe mundial, los cristianos creen en un Dios que no sólo ha creado, sino que sostiene la Tierra por su Providencia. Las llamadas leyes de la naturaleza no son más que una expresión de su voluntad. La Tierra será renovada, pero no destruida. Por eso decía Lutero que si supiera que Cristo vendría mañana, él plantaría un árbol hoy…
EL JUICIO QUE VIENE
Nos podemos burlar de estas profecías –que como la de San Malaquías o Nostradamus, cada uno interpreta caprichosamente y sin ninguna base–, pero la falsa profecía no nos ha de hacer ignorar sin embargo la verdadera Profecía, que hombres inspirados por Dios nos revelan en la Biblia. Ya en tiempos de Pedro se preguntaban algunos: ¿Qué pasó con la promesa de que Jesucristo regresaría? (2 P. 3:4). Generación va y generación viene, pero el mundo permanece…
Esa gente no se quiere dar cuenta de que, hace mucho tiempo, Dios creó los cielos y la tierra, y de que con una sola orden separó la tierra y los mares. Además, Dios usó el agua del diluvio para destruir el mundo de su época; pero con ese mismo poder, ha hado la orden de que, en el momento indicado, los cielos y la tierra que ahora existen sean destruidos con fuego. Serán quemados el día en que Dios juzgue a todos y destruya a los que hacen el mal. (2 Pedro 3:5-7).
Ese fuego no acabará con la Tierra, sino que hará de ella una nueva Tierra. Pero cuando el Señor Jesús regrese, vendrá como cuando un ladrón entra en una casa a robar (v. 10). Será cuando nadie lo espere. No sabemos el día, ni la hora, pero para el Señor, un día es como mil años, y mil años como un día (v. 8). Su tiempo no es nuestro tiempo, pero no es que Dios sea lento para cumplir su promesa, como algunos piensan…
Lo que pasa es que tiene paciencia, no quiere que nadie muera, sino que todos se vuelvan a Él (v. 9). Ahora es el tiempo de su Gracia. Luego será demasiado tarde. Pero nosotros esperamos el cielo nuevo y la tierra nueva que Dios ha prometido, donde todo será bueno y justo (v. 13). Hay por lo tanto un gran futuro para el planeta Tierra.

*José de Segovia es periodista, teólogo y pastor en Madrid

Fuente: © J. de Segovia. ProtestanteDigital.com (España,

martes, 29 de junio de 2010

Kaká defiende poder expresar su fe ante críticas de la prensa brasileña

JOHANNESBURGO (SUDÁFRICA)

El jugador de la selección brasileña contestó a un periodista al que acusa de atacarlo por causa de su fe en Jesús. Juca Kafouri, periodista de la ESPN brasileña, había criticado las manifestaciones públicas de la fe de algunos jugadores brasileños en los partidos. Kaká pidió «que se respete mi fe en Jesucristo y a millones de brasileños que creen en él».
El centrocampista defendió con energía su fe en Jesucristo y exigió respeto a un periodista brasileño que definió como ateo. «Hace algún tiempo los cañones de tu padre me vienen atacando», dijo al hijo del periodista, que ejerce la misma profesión y realiza la cobertura informativa desde Sudáfrica. «Él me viene atacando, pero no por un problema profesional. De la misma forma que respeto a Juca Kafouri como ateo, pido que me respete por mi fe en Jesucristo. Incluso a millones de brasileños que también creen en Jesucristo», enfatizó el jugador del Real Madrid.
Además, Kaká garantizó que su recuperación física «ha sido muy buena», luego de pasar malos momentos por fuertes dolores abdominales, la causa de su mala temporada. «He logrado dar unas arrancadas, que son mi característica» explicó. La selección se enfrenta en octavos de final ante Chile, donde sin duda el jugador partirá desde el equipo titular.
DIFÍCIL TEMPORADA
«Pasé por muchas dificultades físicas durante toda esa temporada. Ha sido difícil porque he tenido una vida de atleta, bien reglamentada. Eso es lo que más me incomodaba y por eso mi deseo de alcanzar el auge de mi forma física», declaró tras admitir que hubo días en que se entrenaba en sesiones de hasta tres veces.
Kaka elogió «el espíritu de equipo» de la actual selección brasileña y advirtió que está en el camino para la conquista del sexto título Mundial tras advertir que estos desafíos los cumple un buen conjunto y no un solo jugador.
«En 2007 gané una ´Champions´ porque jugaba en un Milán muy fuerte, que se hizo con todo lo que disputó. Un jugador no alcanza ni conquista nada solo. El año pasado conquistamos la Copa Confederaciones porque somos un equipo», puntualizó.
También se refirió al juego agresivo que debió afrontar su equipo en el partido que ganaron a Costa de Marfil, el domingo pasado en el estadio Soccer City, de Johannesburgo. Y se declaró emocionado con el apoyo popular que ha palpado en su país, especialmente tras la victoria convincente del pasado domingo.
«Es para esas personas que disfrutan y hacen fuerza por nosotros que nosotros jugamos. El sentimiento de patriotismo nos motiva a entrar en la cancha, aún con dolores. Son millones de futbolistas en el mundo y ser uno de los contados elegidos para disputar un Mundial es un gran privilegio. No puedo describir esa emoción», puntualizó.
«A pesar de ser un grupo tranquilo, nadie en esta selección tiene sangre de cucaracha. En ningún momento Brasil fue deshonesto o faltó al respeto de Costa de Marfil. Ustedes han visto que la selección brasileña nunca ha sido violenta, pero tampoco nos vamos a arrugar frente a la provocación», sentenció.

Fuente: EFE. Edición: ProtestanteDigital.com

lunes, 28 de junio de 2010

Samuel Escobar: una cultura evangélica fiel al ejemplo de Jesús

Por. Jacqueline Alencar, España*
Esta es la opinión del reconocido teólogo peruano residente en España. Es una entrevista de Jacqueline Alencar.
La obra entrevista
Es amplio el currículum de Samuel Escobar. Basta recordar que es doctor en Filosofía y Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense de Madrid, catedrático emérito de Misionología en el Seminario Teológico Palmer de Pennsylvania, y profesor del Seminario Teológico de la UEBE en Madrid. Generaciones de teólogos se han nutrido de sus aportes teológicos. Su último libro es “Cómo comprender la misión” (Certeza Unida, 2008). Hemos querido conocer sus puntos de vista acerca de algunos temas de actualidad para el mundo evangélico.
Pregunta.- España ha sido un lugar meridiano en su vida; primero en sus estudios en la Universidad Complutense, y ahora, en su madurez, ofreciendo la experiencia adquirida en muchos años, muchos países, seguro entrañables para usted, muchas personas transitando por su vida… Ahora, afincado en Valencia. ¿Qué nos puede decir sobre España?
Respuesta.- Me esfuerzo por comprender este país rico en historia y esta sociedad tan plural y con tantas subculturas, cuya convivencia no es nada fácil. Disfruto de la España evangélica enriquecida hoy en día por la presencia de la migración y desafiada a cumplir su misión en tiempos nada fáciles. A ello quisiera contribuir con un granito de arena.
¿Evangelización o Acción Social? ¿Con cuál se quedaría? Si es que resulta posible decantarse sólo por una de ellas.
Es que es imposible separarlas. La evangelización supone una presencia, y la calidad de esa presencia supone, entre otras cosas, un servicio a las necesidades humanas.
En alguno de sus libros, usted ha dicho que los cambios sociales tan urgentes en América Latina vendrían por el cambio de individuos y de estructuras. ¿Podríamos extrapolar esta afirmación a una Europa donde se va percibiendo una crisis de valores aguda? Siendo así, ¿en qué sentido esto constituiría un reto al testimonio evangélico?
En América Latina la presencia de una comunidad evangélica en abierto crecimiento numérico ya ha tenido sus efectos transformadores. Sociólogos evangélicos y no evangélicos, hasta marxistas, han comprobado algunos de esos cambios, especialmente entre comunidades nativas, universos relativamente pequeños en los cuales es posible detectar y medir el cambio social. Un ejemplo interesante es el de la socióloga española Manuela Cantón Delgado, que se pasó una década en Guatemala estudiando el protestantismo popular y sus efectos sociales, y que ha resumido el resultado de su trabajo en su libro Bautizados en fuego (1998). Luego se pasó seis años con un equipo que investigó el impacto de la Iglesia Filadelfia en Andalucía y ofrece el resumen de su trabajo en el libro Gitanos Pentecostales (2004). Aunque sus trabajos son críticos manifiesta un gran respeto por las personas y movimientos que estudia, y detecta los cambios sociales innegables. El reto al testimonio evangélico es a no perder los aspectos transformadores del Evangelio que se predica y a mantener una cultura evangélica fiel al ejemplo de Jesús con su integridad moral y su espíritu de servicio hasta el sacrificio. Ello no es fácil en una sociedad donde la cristiandad declina y los intelectuales reaccionan a veces de manera violenta contra el viejo catolicismo formalista, sin vida espiritual y apegado al poder económico y político, como si eso fuera el cristianismo.
En la labor de la evangelización, que implica proclamación y conversión, ¿no nos estamos olvidando del discipulado, del seguimiento de los nuevos creyentes de manera que vayan ascendiendo en la carrera espiritual? Algunos necesitan mucho de esa nube de testigos de la que se habla en Hebreos 12.
Ha señalado Ud. una carencia notable que preocupa a quienes reflexionan sobre la realidad evangélica de hoy y la estudian. Lo que pasa es que, en este nuevo contexto social en que vivimos, hay que redefinir la naturaleza del discipulado y sus implicaciones y nosotros, tanto para ideas como para materiales educativos, hemos sido dependientes del evangelicalismo anglosajón. Ni siquiera tenemos bien explorada la memoria de la nube de testigos que nos ha precedido en España.
Usted estuvo junto con John Stott, René Padilla, Billy Graham, Michael Cassidy, Ramez Atallah, Ajith Fernando, entre otros, durante la elaboración del Pacto de Lausana allá por 1974, y también en 2007, cuando algunos de estos líderes se reunieron en Budapest para planificar el III Encuentro de Lausana, del que tanto se está hablando hoy. A grosso modo podemos decir que en aquel primer encuentro salieron con las maletas cargadas de buenas intenciones en cuanto a la Misión Integral, ésa que nos dejó Jesús, con las ganas de mirar los potenciales de las iglesias del Sur, un Reino de Dios que no implicaba sólo la salvación de las almas… ¿Hacia dónde estima usted que encaminarán sus reflexiones los líderes que se sienten a dialogar en Ciudad del Cabo el próximo octubre?
Hay que dar gracias a Dios de que las buenas intenciones que usted menciona en Lausana 1974 han dado su fruto en un avance de la evangelización, y en la multiplicación de redes de proyectos de servicio a las necesidades humanas. El mundo que tenemos por delante hoy es un mundo sin utopías ni sueños, por tanto desesperanzado, y al mismo tiempo un mundo consciente de la necesidad de principios éticos que permitan la sobrevivencia. Es un mundo de pluralismo religioso conflictivo, de migración intensa y extensa, de excesos tecnológicos y mitos como el fútbol o la vida alegre de los ídolos que los medios de comunicación promueven. Estos son algunos de los desafíos que se considerarán en Lausana III a la luz de las experiencias cristianas y la Palabra de Dios.
¿Esto significa que debe darse un nuevo diálogo evangélico global con espíritu crítico frente a lo que se ha venido desarrollando hasta hoy, capaz de reconocer errores, extraer lo bueno, aceptar nuevas perspectivas generadas a través de una lectura de la Biblia: leer con ojos nuevos…?
Usted lo ha dicho muy bien pero hay que tomar en cuenta que tanto reconocer errores como leer creativamente la Biblia, con ojos nuevos, no es nada fácil e incomoda a más de uno. En la buena tradición de Lausana el estudio bíblico es la primera actividad del día en el programa de Lausana III, y en este caso tendremos seis expositores de diferentes países, dos de ellos mujeres y relativamente jóvenes. Se considerará la Epístola a los Efesios y ya hay miles de personas, entre los participantes, preparándose por la lectura y estudio de la misma.
Muchos migrantes han llegado a España y se acercan a las iglesias buscando apoyo espiritual y material. ¿Cree que esto está poniendo a prueba la compasión cristiana, la práctica de la fe con los riesgos que ello implica?
Para mí ha sido motivo de gratitud a Dios ver como las iglesias evangélicas, en general, han respondido al desafío sin grandes polémicas. Pero no es nada fácil crecer en la calidad de la convivencia, la aceptación del otro, y ello presenta grandes y nuevos desafíos pastorales.
Los que llegan de otras latitudes traen consigo un bagaje de costumbres, formas de expresar la alabanza, doctrinas… que a veces pueden resultar “chocantes” a los autóctonos. Pero también vienen cargados de dinamismo, experiencias cristianas, nuevas estrategias de evangelizar… ¿Se requiere por la parte local de paciencia, tolerancia y sabiduría a la hora de facilitar su aprendizaje y adaptación a las formas nuevas a las que se enfrentan? ¿Debemos aprender a trabajar con su entusiasmo, pero con sabiduría? El capítulo 14 de Romanos es una pastoral de la receptividad, ¿cree que ya se está instalando en nuestras iglesias?
Usted ha descrito bien el desafío que tienen las iglesias por delante, y he podido ser testigo de varios casos de iglesias en España donde se está dando una colaboración fructífera entre españoles e inmigrantes. Creo que el espíritu de la receptividad que es una de las claves de lectura de la Epístola a los Romanos se está manifestando. Hay resistencias y hay fracasos, pero creo que estamos avanzando y tomando conciencia.
¿Constituye la migración una vía para que la iglesia evangélica se estrene o afiance en la Vida Pública?
Definitivamente creo que sí. Un dato interesante son las publicaciones de la Fundación Pluralismo y Convivencia sobre el papel de las religiones en la integración de los migrantes. He visto los libros sobre este tema dedicados a Cataluña, Madrid y Valencia, que digamos de paso, ofrecen descripciones bastante aceptables de las comunidades evangélicas y de lo que están haciendo.
Usted puede dar testimonio de la transformación que se ha dado en la vida de muchos estudiantes en distintas partes del mundo. Es más, usted es uno de los precursores y voy a citar muchos otros nombres como los de John Stott, John White, Pedro Arana, Stuart Park, David Burt, Rodolfo González (padre), Ruth Siemens, Jorge Atiencia, entre otros, en la tarea de crear y mantener el movimiento estudiantil tanto en América Latina como en Europa y el resto del mundo durante mucho tiempo (IFES, GBU, CIEEAL). ¿Se continúan removiendo los corazones en el interior de nuestras universidades a ese nivel?
Agradezco a Dios porque el movimiento estudiantil evangélico sigue avanzando. En países como México, Brasil, Perú se han visto avances notables. Durante el Congreso de Comibam en Granada (2006), me senté a comer un mediodía con un grupo de misioneros que trabajaban en Asia y África. Para sorpresa mía descubrí que seis de los ocho que allí estaban habían encontrado su vocación misionera en su grupo universitario evangélico. Mi hijo que trabaja en desarrollo económico con el Banco Interamericano de Desarrollo en Washington, en sus viajes se encuentra siempre con directivos de ONGs evangélicas o no, que le cuentan que el desafío al servicio y los primeros pasos los dieron en la obra estudiantil. Y la gente joven es muy creativa en cuanto a medios de comunicar el Evangelio, como ese hermoso libro que combina pintura moderna y el texto de Eclesiastés, publicado por los GBU de España.
Al día de hoy, ¿cómo debemos comprender la Misión de la Iglesia en un mundo globalizado, con los valores cristianos a la baja, desbordados por el relativismo, el laissez faire y el laissez passer?
Con gran acierto dice el misionólogo español Ángel Bueno de la Fuente que España se debate hoy entre cristianismo y paganismo más bien que secularización. Yo creo que lo mismo pasa en otros países europeos y aun en América Latina. O sea que estamos en una situación similar a la de la iglesia del Nuevo Testamento cuando empezó su expansión en el mundo pagano. Hay que recuperar el talante y el estilo misionero de aquella época: su centralidad en Cristo, su confianza en que Dios está en acción en el mundo, su alegría y celebración entusiasta, su disciplina de vida. Hay que dejarse impulsar por el Espíritu Santo, una vez más.
Hablando de misión, ¿dónde encaja lo que se llama la contextualización?
En cada momento de la misión. Es cuestión de entender el contexto socio-cultural que nos rodea y responder a las preguntas que nos plantea desde el texto de la Palabra revelada. Por eso, cada generación forja sus propias respuestas, y las respuestas de otros contextos nos pueden ayudar pero no son suficientes.
¿Debe darse una nueva Reforma para que se pueda ver muchas más vidas transformadas?
Ya lo dijeron los reformadores del siglo dieciséis: ecclesia reformata semper reformanda est. Es decir, una iglesia que ya es reformada pero que siempre está abierta a un nuevo proceso de reforma continua.
Diego Thomson, primer agente de la Sociedad Bíblica Británica, fue uno de los pioneros en la labor de traducir el Nuevo Testamento a lenguas indígenas en América Latina; y muchos otros siguieron su estela en los dos últimos siglos. Pero pregunto, ¿se puede decir que ya quedan menos etnias que no hayan escuchado hablar del evangelio de Jesús y, por lo tanto, podemos bajar la guardia y dedicarnos a otros menesteres?
La Sociedad Bíblica informa que según la UNESCO se hablan unas 6.000 lenguas y dialectos en el mundo. Actualmente, se han alcanzado a 2.479 lenguas con alguna porción de la Biblia o toda ella. Se está trabajando en 700 lenguas más, pero es evidente que queda mucho camino por recorrer. No hemos de bajar la guardia.
Ya sé que este es un tema polémico, pero que nos atañe a todos los evangélicos: el de la financiación de la iglesia con recursos del Estado, ¿podría darnos una opinión personal?
Creo que las iglesias deben atender a su culto y ministerio con sus propios recursos, las ofrendas de sus fieles. Esto le da independencia frente al Estado y evita que la iglesia se haga instrumento del Estado. Acepto que para las tareas de servicio a la comunidad se utilice recursos de que el Estado dispone, y que son resultado de los impuestos que todos, incluidos los evangélicos, pagamos. Eso sí, hay que mantener claridad y transparencia en el proceso.

*Jacqueline Alencar es directora de la revista Sembradoras

Fuente: © J. Alencar (Protestante Digital. España)

domingo, 27 de junio de 2010

El puritanismo y la democracia moderna (II)

Por. César Vidal, España*
Señalaba yo en mi última entrega que es imposible comprender el nacimiento de la democracia moderna sin hacer referencia al peso de la Reforma y, en especial, del pensamiento puritano en su configuración. Los progres norteamericanos llevan décadas intentando negar ese aspecto indiscutible y, desde luego, han conseguido que los medios de comunicación y no pocos profesores universitarios asuman la tesis – bien falsa, por cierto – de que los Padres fundadores eran una especie de descreídos laicistas que abominaban de la herencia puritana.
Semejante disparate quedaría fácilmente disipado sólo con aplicar el principio protestante de acudir a las fuentes para ver lo que dicen. Es lo que pienso hacer en mis próximas entregas. En ésta, intentaré mostrar cómo el peso del puritanismo fue decisivo en el proceso constitucional de la primera democracia moderna y como, efectivamente, así fue reconocido por los contemporáneos del proceso. En la siguiente, me ocuparé de la mentalidad de los creadores de esa primera democracia de los que sólo uno fue teísta – desde luego, no ateo ni agnóstico – y otro católico.
Como señaló en su día el estadista inglés sir James Stephen, el calvinismo político se resumía en cuatro puntos: 1. La voluntad popular era una fuente legítima de poder de los gobernantes; 2. Ese poder podía ser delegado en representantes mediante un sistema electivo; 3. En el sistema eclesial clérigos y laicos debían disfrutar de una autoridad igual aunque coordinada y 4. Entre la iglesia y el estado no debía existir ni alianza ni mutua dependencia. Sin duda, se trataba de principios que, actualmente, son de reconocimiento prácticamente general en occidente pero que en el siglo XVI distaban mucho de ser aceptables.
Durante el siglo XVII, los puritanos ingleses optaron fundamentalmente por dos vías. No pocos decidieron emigrar a Holanda -donde los calvinistas habían establecido un peculiar sistema de libertades que proporcionaba refugio a judíos y seguidores de diversas fes- o incluso a las colonias de América del norte. De hecho, los famosos y citados Padres peregrinos del barco Mayflower no eran sino un grupo de puritanos. Por el contrario, los que permanecieron en Inglaterra formaron el núcleo esencial del partido parlamentario -en ocasiones hasta republicano- que fue a la guerra contra Carlos I, lo derrotó y, a través de diversos avatares, resultó esencial para la consolidación de un sistema representativo en Inglaterra.
La llegada de los puritanos a lo que después sería Estados Unidos fue un acontecimiento de enorme importancia. Puritanos fueron entre otros John Endicott, primer gobernador de Massachusetts; John Winthrop, el segundo gobernador de la citada colonia; Thomas Hooker, fundador de Connecticut; John Davenport, fundador de New Haven; y Roger Williams, fundador de Rhode Island. Incluso un cuáquero como William Penn, fundador de Pennsylvania y de la ciudad de Filadelfia, tuvo influencia puritana ya que se había educado con maestros de esta corriente teológica. Desde luego, la influencia educativa fue esencial ya que no en vano Harvard -como posteriormente Yale y Princeton- fue fundada en 1636 por los puritanos.
Cuando estalló la revolución americana a finales del siglo XVIII, el peso de los puritanos en las colonias inglesas de América del norte era enorme. De los aproximadamente tres millones de americanos que vivían a la sazón en aquel territorio, 900.000 eran puritanos de origen escocés, 600.000 eran puritanos ingleses y otros 500.000 eran calvinistas de extracción holandesa, alemana o francesa. Por si fuera poco, los anglicanos que vivían en las colonias eran en buena parte de simpatía calvinista ya que se regían por los Treinta y nueve artículos, un documento doctrinal con esta orientación. Así, dos terceras partes al menos de los habitantes de los futuros Estados Unidos eran calvinistas y el otro tercio en su mayoría se identificaba con grupos de disidentes como los cuáqueros o los bautistas. La presencia, por el contrario, de católicos era casi testimonial y los metodistas aún no habían hecho acto de presencia con la fuerza que tendrían después en Estados Unidos. Afirmar, pues, como han hecho algunos, que el peso de los puritanos ya no existía en el s. XVIII constituye una muestra indudable de ignorancia supina o de mala fe rampante.
Naturalmente, así lo vieron los contemporáneos. De hecho, el panorama resultaba tan obvio que en Inglaterra se denominó a la guerra de independencia de Estados Unidos “la rebelión presbiteriana” y el propio rey Jorge III afirmó: “atribuyo toda la culpa de estos extraordinarios acontecimientos a los presbiterianos”. Por lo que se refiere al primer ministro inglés Horace Walpole, resumió los sucesos ante el parlamento afirmando que “la prima América se ha ido con un pretendiente presbiteriano”. No se equivocaban y, por citar un ejemplo significativo, cuando el general británico Cornwallis fue obligado a retirarse para, posteriormente, capitular en Yorktown, todos los coroneles del ejército americano salvo uno eran presbíteros de iglesias presbiterianas. Por lo que se refiere a los soldados y oficiales de la totalidad del ejército, algo más de la mitad también pertenecían a esta corriente religiosa. ¡Como influencia histórica inexistente no estaba nada mal!
El influjo de los puritanos resultó especialmente decisivo en la redacción de la constitución. Ciertamente, los cuatro principios del calvinismo político arriba señalados fueron esenciales a la hora de darle forma, pero a ellos se unió otro absolutamente esencial que, por si solo, sirve para explicar el desarrollo tan diferente seguido por la democracia en el mundo anglosajón y en el resto de occidente. La Biblia -y al respecto las confesiones surgidas de la Reforma fueron muy insistentes- enseña que el género humano es una especie profundamente afectada moralmente como consecuencia de la caída de Adán. Por supuesto, los seres humanos pueden hacer buenos actos y realizar acciones que muestran que, aunque empañadas, llevan en sí la imagen y semejanza de Dios. Sin embargo, la tendencia al mal es innegable y hay que guardarse de ella cuidadosamente. Por ello, el poder político debe dividirse para evitar que se concentre en unas manos -lo que siempre derivará en corrupción y tiranía- y debe ser controlado. Esta visión pesimista -¿o simplemente realista?- de la naturaleza humana ya había llevado en el siglo XVI a los puritanos a concebir una forma de gobierno eclesial que, a diferencia del episcopalismo católico o anglicano, dividía el poder eclesial en varias instancias que se frenaban y contrapesaban entre sí evitando la corrupción.
Esa misma línea fue la seguida a finales del siglo XVIII para redactar la constitución americana. De hecho, el primer texto independentista norteamericano no fue, como generalmente se piensa, la declaración de independencia redactada por Thomas Jefferson sino el texto del que el futuro presidente norteamericano la copió. Éste no fue otro que la Declaración de Mecklenburg, un texto suscrito por presbiterianos de origen escocés e irlandés, en Carolina del norte el 20 de mayo de 1775. La Declaración de Mecklenburg contenía todos los puntos que un año después desarrollaría Jefferson desde la soberanía nacional a la lucha contra la tiranía pasando por el carácter electivo del poder político y la división de poderes. Por añadidura, fue aprobada por una asamblea de veintisiete diputados -todos ellos puritanos- de los que un tercio eran presbíteros de la iglesia presbiteriana incluyendo a su presidente y secretario. La deuda de Jefferson con la Declaración de Mecklenburg ya fue señalada por su biógrafo Tucker, pero además cuenta con una clara base textual y es que el texto inicial de Jefferson -que ha llegado hasta nosotros- presenta notables enmiendas y éstas se corresponden puntualmente con la declaración de los presbiterianos.
El carácter puritano de la Constitución -reconocido magníficamente, por ejemplo, por el español Emilio Castelar- iba a tener una trascendencia innegable. Mientras que el optimismo antropológico de Rousseau derivaba en el terror de 1792 y, al fin y a la postre, en la dictadura napoleónica o el no menos optimismo socialista propugnaba un paraíso cuya antesala era la dictadura del proletariado, los puritanos habían trasladado desde sus iglesias a la totalidad de la nación un sistema de gobierno que podía basarse en conceptos desagradables para la autoestima humana pero que, traducidos a la práctica, resultaron de una eficacia y solidez incomparables.
Si a este aspecto sumamos además la práctica de algunas cualidades como el trabajo, el impulso empresarial, el énfasis en la educación o la fe en un destino futuro que se concibe como totalmente en manos de un Dios soberano, justo y bueno contaremos con muchas de las claves para explicar no sólo la evolución histórica de Estados Unidos sino también sus diferencias con los demás países del continente.
Por supuesto, los ciudadanos de las repúblicas situadas al sur del río Grande pueden seguir culpando a los Estados Unidos de todos sus males, pero semejante actitud, en no escasa medida, resulta semejante a la del niño que no ha estudiado y arroja la responsabilidad de su holgazanería sobre el profesor que, supuestamente, le tiene manía. La herencia indígena que algunos se empeñan todavía en reivindicar, la mentalidad católica de siglos, el peso de la masonería presente desde los Padres de las patrias hispanoamericanas, la corrupción galopante, la falta de una justicia independiente y la inclinación hacia modelos intervencionistas de izquierdas se encuentran en la base del desastre hispanoamericano a la hora de crear sistemas verdaderamente democráticos.
Al respecto, la lectura de libros como Del buen salvaje al buen revolucionario del venezolano Carlos Rangel pueden ser una buena vacuna contra tanta demagogia barata que pretende culpar hasta de los ciclones a los Estados Unidos. Por el contrario, la ausencia de esos factores al norte del río Grande y la implantación de un verdadero sistema democrático emanado de principios bíblicos explica también, en no escasa medida, el desarrollo histórico no sólo de los Estados Unidos sino también del Canadá. Pero sobre la necesidad de sustentar la democracia en una cosmovisión cristiana surgida de la Biblia hablaré, Dios mediante, en mi próxima entrega.

Continuará.

*César Vidal es escritor, historiador y teólogo
Fuente: © C. Vidal, ProtestanteDigital.com

sábado, 26 de junio de 2010

El origen de la democracia moderna: De algunos mitos difundidos sobre el protestantismo (I)

Por. César Vidal, España*

Señalaba yo en mi última entrega cómo el desarrollo del capitalismo había sido, con todos los matices que se deseen, una consecuencia directa de la Reforma del s. XVI y, en medida nada pequeña, un elemento de avance y progreso extraordinario que supo reconocer el mismo Marx aunque no pocos marxistas lo ignoren. Semejante circunstancia explica la dificultad de ciertas naciones para sumarse a ese avance y la forma en que lo hacen todavía en la actualidad a trancas y barrancas. Algo muy similar cabe decir de otro de los grandes aportes del protestantismo: la democracia moderna.
El primer parlamento moderno no fue, como suele pensarse, el inglés a inicios del s. XIII, sino el leonés en 1188. De ese parlamento leonés surgió una Charta Magna leonesa, anterior en varias décadas a la inglesa. Abrió además un camino que sería seguido por las Cortes en Castilla y después por las de los distintos territorios de la Corona de Aragón.
Sin embargo, en España el parlamentarismo quedó detenido - como en Francia o Polonia -mientras que despegaba en Inglaterra- y la razón no fue otra que la Reforma. El primer momento de oro en los inicios de la democracia moderna fue la revolución puritana de mediados del s. XVII. Merece la pena recordar los motivos de la revuelta porque arrojan una enorme luz sobre la democracia real y no supuesta.
Los puritanos se alzaron contra Carlos I para defender tres derechos muy concretos: la libertad de culto, la libertad de expresión y la propiedad privada. Un gobierno que no estaba dispuesto a reconocer esos tres derechos era, por su propia naturaleza, despótico. Se puede pensar lo que se quiera, pero la verdad es que el planteamiento de los puritanos, surgido totalmente de la Reforma, tiene una actualidad tremenda y obliga a cuestionarnos la calidad real de ciertas democracias. Por ejemplo, si el parlamento, en lugar de defender a los ciudadanos contra las subidas de impuestos, se convierte en mecanismo privilegiado para aumentarlos, esa democracia está tan enferma como si las fuerzas policiales en lugar de detener a los delincuentes realizara con ellos negocios a medias. Extiéndase el ejemplo a la libertad de expresión o a la de religión.
A diferencia de otros ideólogos posteriores y anteriores, los puritanos no creían en una utopía basada en la bondad humana. Seguramente por eso, no cayeron en visiones socialistas como las formuladas por Tomás Moro o Campanella -ambos católicos, por cierto- sino que pensaron en articular un sistema que reconocía de entrada que el ser humano es pecador.
Habrá quien piense que semejante punto de partida era teológico y, por lo tanto, erróneo. Habrá que responder que un punto de partida teológico no es invalido per se. Tan sólo depende de que sea equivocado o acertado. Éste difícilmente hubiera podido ajustarse más a la realidad y basta con salir a la calle para darse cuenta de ello. Precisamente para evitar el despotismo que deriva de la condición humana caída, los puritanos abogaron por una separación de poderes. El sistema quedaba así definido por la existencia de una justicia independiente y libre que debía garantizar el imperio de la ley, un parlamento elegido por el pueblo y un ejecutivo que pudiera ser controlado por los representantes populares. De manera bien significativa, los representantes elegidos no tenían como misión representar a unos partidos sino a los ciudadanos. Semejante visión implicaba que el parlamentario respondía ante sus electores y no ante una cúpula de nuevo poder formada por los partidos. De hecho, cuando, finalmente, los partidos hicieron su aparición en la vida política inglesa, se mantuvo la tesis de que los parlamentarios respondían ante los electores de su circunscripción y no ante las cúspides de la formación política de la que formaban parte. Naturalmente, hoy pocos lo reconocerían, pero en los escritos de la época los puritanos aparecen como seres odiosos injertados en un pueblo de locos como los ingleses. Sin embargo, estaban totalmente dotados de razón como la Historia ha dejado de manifiesto. Inglaterra sufrió una Restauración absolutista con Carlos II -monarca que, al final de su vida, se convirtió al catolicismo- pero el gusto por la libertad ya estaba demasiado arraigado entre los ingleses. La Gloriosa revolución -una revolución pacífica- significó el regreso casi inmediato del sistema parlamentario para no desaparecer ya.
Con todo, el gran salto hacia un sistema democrático lo dieron los descendientes de los puritanos a finales del s. XVIII en lo que sería conocido como los Estados Unidos de América. Aquellas colonias inglesas habían sido pobladas en no escasa medida por gente que amaba a Dios, que creía firmemente en la Biblia y que había preferido abandonar su tierra y trasplantarse al otro lado del Atlántico a no tener plena libertad religiosa. Pocas emigraciones -si es que alguna- ha sido tan fecunda como ésa para el progreso del género humano.
Los Padres fundadores estaban empapados de la visión teológica de los puritanos. De hecho, de todos ellos solo uno era católico y otro teísta. El resto era medularmente protestante e incluso muy firmemente creyente. El resultado fue la creación de un sistema puro de división de poderes, un énfasis enorme en la libertad de conciencia -lo que exigía una separación entre iglesia y estado bien distinta, por ejemplo, del posterior laicismo de la masonería- una desconfianza hacia la formación de partidos (Jefferson afirmaba que la democracia podía sobrevivir sin partidos, pero no sin libertad de prensa), una insistencia en la independencia judicial y el imperio de la ley, y, finalmente, una convicción de que la democracia sólo era posible si contaba con un sustrato moral sólido que arrancaba de las páginas de la Biblia. Como señalaría Adams, sin gente de ese tipo la democracia era lisa y llanamente imposible.
Como había sucedido con los puritanos ingleses -o con el capitalismo- la república americana fue vista con desconfianza en casi todo el continente europeo, pero -también como el capitalismo- la democracia se fue imponiendo poco a poco porque, a fin de cuentas, era, según dijo Winston Churchill, “el peor sistema político, excluidos todos los demás”.
Tras la segunda guerra mundial, la superioridad de la democracia era tan obvia que las dictaduras comunistas del Este de Europa se autodenominaron “democracias populares” y el régimen franquista se definió -tomando una expresión creada en los años treinta por Salvador de Madariaga- como una “democracia orgánica”. Incluso la Santa Sede acabó aceptando la creación de una “democracia cristiana” que adoptó la forma de partidos políticos y de una internacional, ya extintos.
Sin embargo -de nuevo como el capitalismo- una cosa era aceptar de manera formal la bondad del sistema y otra, lamentablemente distinta, que éste funcionara. En esta cuestión el peso de la Reforma -o de su ausencia- también resultó considerable, pero a ese espinoso tema dedicaré mi próxima entrega.

CONTINUARÁ: El protestantismo y el origen de la democracia moderna (II)

*César Vidal es escritor, historiador y teólogo

Fuente: © C. Vidal, ProtestanteDigital.com

viernes, 25 de junio de 2010

OBISPADO DE SAN JUSTO SOBRE REFORMA DEL RÉGIMEN MATRIMONIAL

San Justo, Bs. As. Argentina.

En el día de la fecha el Obispo de San Justo, Mons. Baldomero Martini, y su Obispo Auxiliar, Mons. Damián Bitar, enviaron una carta a Julio Cobos, Vicepresidente de la República y Presidente de la Cámara de Senadores de la Nación, con consideraciones sobre el proyecto que intenta reformar el régimen matrimonial argentino.
Recuerdan los prelados que a la naturaleza misma del matrimonio pertenecen las cualidades “de distinción, complementariedad y reciprocidad de los sexos, y la riqueza admirable de su fecundidad”. En las uniones homosexuales, afirman, “no hay nada que tenga que ver con el matrimonio”.
Destacan “que los partidarios de este proyecto de ley han acudido con patetismo a los sentimientos –a falta de razones valederas-“. “Se adujo, afirman, que no podrían coartarse los afectos de dichas ‘minorías sexuales’”. Explican luego que “todos los afectos quedan al margen del derecho y de las leyes” y tras ejemplificarlo enfatizan: “el afecto que puedan guardarse entre sí los convivientes homosexuales, no les da derecho a ninguna regulación legal. Lo contrario implicaría una injusticia intolerable, ya que los únicos afectos protegidos por la ley serían los de los ciudadanos homosexuales; y esto frente a amores mucho más generosos, intensos y creativos como los de los esposos, padres, hijos y hermanos. Estaríamos frente a una mayúscula discriminación injusta. Tan irracional como intolerable”.
Al referirse a la adopción señalan que el proyecto “entrega hijos en adopción a quienes voluntariamente optaron vitalmente por negarse a ser padre o madre” y resaltan el cuidado que debemos tener con lo niños.
Tras analizar otros argumentos esgrimidos por los impulsores de la reforma concluyen: “la pseudo argumentación vertida en favor del proyecto de ley en revisión, no resiste el más benévolo test de racionalidad”.
A continuación el texto completo de la misiva:
San Justo, 23 de Junio de 2010
Al Señor Vicepresidente de la República
y Presidente de la Cámara de Senadores de la Nación
Ing. Julio César Cleto Cobos


Estimado Señor:

Reciba mis más cordiales saludos y deseos de Paz y Bien en Jesucristo, Señor de la Historia; que le ruego, extienda al resto de los integrantes de la Honorable Cámara de Senadores de la Nación, remitiéndoles copia de la presente; y en especial a los integrantes de la Comisión de Legislación General, presidida por la Dra. Liliana Negre de Alonso.
Las circunstancias nos obligan a escribirle en nuestro doble carácter de ciudadanos y Obispos, Titular y Auxiliar de la Diócesis de San Justo -La Matanza-. El bien común temporal como fin de toda la actividad política y la legislativa lo es en grado sumo, no es ajeno a nuestro ministerio episcopal, cuya finalidad es también el bien común, aunque en un sentido más amplio. Precisamente esta convergencia en el bien común de nuestras tareas, es la que requiere dirigirnos a Ud. y, por su intermedio, a todos los Señores Senadores de la Nación, para que tengan en cuenta estas consideraciones, referidas al proyecto de ley en revisión, por el que se reforma completamente el régimen matrimonial argentino, incluyendo las uniones homosexuales, posibilitándoles además, la adopción de hijos, a los que se les priva de tener un padre y una madre, para que los críen y eduquen.
En este escrito hacemos nuestras, las reflexiones del Documento Final de la 99° Asamblea General de la Conferencia Episcopal Argentina “Sobre el bien inalterable del Matrimonio y la Familia”, del 20 de abril del corriente año. Allí nos propusimos dialogar con todos los argentinos de buena voluntad –sean o no creyentes-, en relación a la célula social básica. Dijimos que “la claridad del diálogo exige un discernimiento en orden a reconocer la verdad, sobre la cual los pastores no podemos callar. Eso no supone menosprecio ni discriminación”.
En el marco de ese diálogo sereno, recordamos que “el matrimonio es la forma de vida en la que se realiza una comunión singular de personas, y ella otorga sentido plenamente humano al ejercicio de la función sexual. A la naturaleza misma del matrimonio pertenecen las cualidades mencionadas de distinción, complementariedad y reciprocidad de los sexos, y la riqueza admirable de su fecundidad. El matrimonio es un don de la creación. No hay una realidad análoga que se le pueda igualar. No es una unión cualquiera entre personas; tiene características propias e irrenunciables, que hacen del matrimonio la base de la familia y de la sociedad. Así fue reconocido en las grandes culturas del mundo. Así lo reconocen los tratados internacionales asumidos en nuestra Constitución Nacional (cf. Art. 75, inc. 22). Así lo ha entendido siempre nuestro pueblo”.
Con relación a este proyecto de ley, nos vemos en la obligación de recordar a los señores Senadores, que la unión estable de un varón y una mujer abierta a la vida –desde siempre conocida como matrimonio, que deriva del latín matri munus, o sea “el oficio de la madre”-, es algo completamente diferente a las convivencias homosexuales. Allí no hay madre posible, ni nadie que realice sus tareas, tampoco hay marido ni mujer, no hay esposos, no hay hijos, no hay hermanos… En síntesis, no hay nada que tenga que ver con el matrimonio.
En el n° 3 del Documento Episcopal citado, decíamos que “Corresponde a la autoridad pública tutelar el matrimonio entre el varón y la mujer con la protección de las leyes, para asegurar y favorecer su función irreemplazable y su contribución al bien común de la sociedad. Si se otorgase un reconocimiento legal a la unión entre personas del mismo sexo, o se las pusiera en un plano jurídico análogo al del matrimonio y la familia, el Estado actuaría erróneamente y entraría en contradicción con sus propios deberes, al alterar los principios de la ley natural y del ordenamiento público de la sociedad argentina”.
No se nos escapa que los partidarios de este proyecto de ley han acudido con patetismo a los sentimientos –a falta de razones valederas-. Se adujo que no podrían coartarse los afectos de dichas “minorías sexuales”. En realidad, todos los afectos quedan al margen del derecho y de las leyes. Si los afectos tuvieran alguna relevancia jurídica, debería haber un registro público de amigos, ya que se trata del afecto más universal y abarcativo en la vida de toda persona humana; en materia matrimonial un requisito ineludible para su validez sería el amor al momento de contraer el vínculo; finalmente, los padres estarían obligados jurídicamente a amar a sus hijos. Sin embargo, nunca en ninguna legislación de ningún país del mundo ello es así. Los registros de amigos no existen. Y los padres están obligados a criar y educar a sus hijos, pero no hay autoridad estatal que pueda obligarlos a amar a sus vástagos. La razón ya fue apuntada: los afectos son materia extrajurídica. Por tanto, el afecto que puedan guardarse entre sí los convivientes homosexuales, no les da derecho a ninguna regulación legal. Lo contrario implicaría una injusticia intolerable, ya que los únicos afectos protegidos por la ley serían los de los ciudadanos homosexuales; y esto frente a amores mucho más generosos, intensos y creativos como los de los esposos, padres, hijos y hermanos. Estaríamos frente a una mayúscula discriminación injusta. Tan irracional como intolerable.
Decíamos también en nuestro documento que “Desde su concepción, los niños tienen derecho inalienable a desarrollarse en el seno de sus madres, a nacer y crecer en el ámbito natural del matrimonio. En la vida familiar y en la relación con su padre y su madre, los niños descubren su propia identidad y alcanzan la autonomía personal” (n° 4).
El proyecto de ley en revisión hace exactamente lo contrario: entrega hijos en adopción a quienes voluntariamente optaron vitalmente por negarse a ser padre o madre. Va de suyo que la adopción siempre ha sido darle un padre y una madre a un niño abandonado. Aquí se propone lo contrario: entregar un hijo abandonado a quienes no quieren ni pueden ser mamá ni papá. ¡Cuánto cuidado debemos tener con lo niños!
Los obispos de la Argentina también sostuvimos en el Documento citado, que “las situaciones jurídicas de interés recíproco entre personas del mismo sexo pueden ser suficientemente tuteladas por el derecho común. Por consiguiente, sería una discriminación injusta contra el matrimonio y la familia otorgar al hecho privado de la unión entre personas del mismo sexo un estatuto de derecho público” (n° 5).
Esto es por demás evidente: las reglas del condominio y de las sociedades son suficientes para la adquisición, administración y disposición de sus bienes. En materia de previsión social, cada persona debe aportar a la Caja de Jubilaciones y Obra Social, que le corresponda según su situación laboral.
En síntesis la pseudo argumentación vertida en favor del proyecto de ley en revisión, no resiste el más benévolo test de racionalidad.
Finalmente, debemos recordar a los Señores Senadores, que los tratados de derechos humanos con jerarquía constitucional, otorgan dichos derechos fundamentales a todas las personas humanas. Con una única excepción: el derecho a contraer matrimonio sólo es reconocido –porque se trata de una realidad natural anterior al Estado y las leyes-, al varón y a la mujer para casarse entre sí, como expresamente lo establecen el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en su art. 23, inc. 2, y Convención Americana sobre Derechos Humanos, art. 17, inc. 1, entre otros textos. El proyecto de ley en revisión es, pues, inconstitucional, por lo cual debería ser rechazado y archivado.
Señor Presidente y distinguidos Señores Senadores, reciban Uds. junto a un respetuoso saludo, nuestra bendición y oración por tan importante tarea legislativa, todo ello en Cristo Jesús, que es la Vida y la fuente de toda Verdad, Razón y Justicia.

¡DIOS ES AMOR!

+Baldomero Carlos Martini, Obispo de San Justo
+Damián Santiago Bitar, Obispo Auxiliar de San Justo

¡QUEREMOS SER NACIÓN, UNA NACIÓN CUYA IDENTIDAD SEA LA PASIÓN POR LA VERDAD Y EL COMPROMISO POR EL BIEN COMÚN!

_________________________________________
NOTIVIDA, Año X, Nº 714, 23 de junio de 2010
Editores: Lic. Mónica del Río y Pbro. Dr. Juan C. Sanahuja
Página web: www.notivida.org
Email: notivida@hotmail.com
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jueves, 24 de junio de 2010

Testimonio de padre encarcelado en EEUU por pedir que no se adoctrine a su hijo en la homosexualidad

"La profesora nos dijo que según Educación no tenían la obligación de avisar a los padres y que cualquier adulto en la escuela podría hablar de homosexualidad a nuestro hijo", explica la esposa. Un episodio sucedido recientemente en Estados Unidos ha dado que pensar. El matrimonio formado por David y Tonia Parker pidieron a la escuela que les avisaran cuando enseñaran a ver como moralmente buenas las relaciones homosexuales. La profesora se negó porque en el Estado de Massachussets el matrimonio gay es legal. David fue esposado y llevado a comisaría por no querer irse sin ver reconocidos sus derechos como padre. Finalmente perdió el juicio contra este Estado.
Tony Perkins, presidente de la Family Research Council, afirma que "los hechos demuestran que todo cambia cuando el matrimonio homosexual se hace legal", ya que "si se legaliza entonces debe ser enseñado como normal, aceptable y moral en cada escuela pública". "En las escuelas públicas, incluso infantil, deben enseñar a sus hijos a aceptar que el matrimonio homosexual es una opción moral más. Y esto confunde a los niños", concluye.

http://www.caminocatolico.org/
Queridos (as) amigos (as) argentinos, mire lo que puede acontecer, cuando cedemos a nuestros derechos; luchemos y pidamosle al Estado argentino que se haga un plesbiscito. Es mejor luchar ahora, que vivir condenado de por vida por esos que quieren convencerno que es normal la homosexualidad, lesbianismo, bisexualidad, que sé yo. Luchemos por el derecho natural que es la esencia del matrimonio, entre un hombre y una mujer, volvamos a recuperar la Palabra de Dios como fundamento de nuestra ética y moral, no dejemos que se despierte el espiritu de sodoma...






NO adopcion de niños por padres homosexusles



EX GAY - TESTIMONIO - EX HOMOSEXUAL


miércoles, 23 de junio de 2010

La Iglesia Evangélica Luterana Argentina, contraria a la ley del matrimonio gay

BUENOS AIRES, (ProtestanteDigital.com)

Las manifestaciones de iglesias evangélicas argentinas contra la ley que permite el matrimonio entre homosexuales siguen sucediéndose. Tras la marcha de protesta que convocó a unos treinta mil asistentes frente al Congreso en Buenos Aires, la Iglesia Evangélica Luterana Argentina ha manifestado también su rechazo a la ley.
La Iglesia Evangélica Luterana Argentina (IELA) se ha pronunciado en contra del matrimonio gay por medio de un comunicado en el que expresan «su desacuerdo con la modificación de la Ley de matrimonio», desaprobando toda ley que «habilite la posibilidad de contraer matrimonio a personas del mismo sexo».
La IELA afirma que el matrimonio fue «instituido por Dios para satisfacer necesidades humanas de compañía», pero «sólo entre un hombre y una mujer». «El matrimonio es la relación establecida y ordenada por Dios», afirma el comunicado, que además condena la práctica homosexual de acuerdo a varias citas bíblicas.
El comunicado concluye afirmando que «la Biblia considera a la postura homosexual como una desviación de la norma de Dios y exhorta a las personas con tal orientación a abstenerse de prácticas y parejas homosexuales. Al mismo tiempo, como cristianos, debemos mostrar verdadero amor y gran compasión para con las personas involucradas, sabiendo que Dios Todopoderoso, por la obra de salvación realizada por Cristo, quiere y puede restaurarlas íntegramente».
La IELA se desmarca así de la opinión de otras dos iglesias de tradición luterana del país, las iglesias Evangélica del Río de la Plata (IERP) y Luterana Unida (IELU), que como informó Protestante Digital sí apoyan esta ley.

Fuente y edición: ProtestanteDigital.com.
Nota relacionada al tema

Posición de la Iglesia Evangélica Luterana Argentina con respecto al MATRIMONIO HOMOSEXUAL
La Iglesia Evangélica Luterana Argentina expresa su desacuerdo con la modificación de la Ley de matrimonio. Desaprueba toda ley que habilite la posibilidad de contraer matrimonio a personas del mismo sexo.
La Iglesia Evangélica Luterana Argentina sostiene:
1.Todos somos humanos creados por Dios. No podemos, ni queremos deshumanizar a nadie.
2.Todos somos seres sexuados. Cuando Dios hizo a la raza humana, nos creó varón y mujer.
3.Todos somos pecadores. El pecado ha corrompido también la sexualidad. Nadie a excepción de Cristo, a quien necesitamos para ser salvos, está limpio del pecado sexual.
4.La Biblia solo contempla el matrimonio como un pacto heterosexual exclusivo entre un hombre y una mujer.“Por tanto dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán una sola carne” (Génesis 2.24). Dios no ofrece ni permite otra alternativa.
El matrimonio fue establecido (instituido) por Dios para satisfacer las necesidades humanas de compañía. En Génesis capítulo 2 verso 18 dice: “No es bueno que el hombre esté solo”. Dios nos ha creado seres sociales y quiere proveer para satisfacer las necesidades que surgen de ésta condición. Dios hizo una “ayuda idónea” para el hombre. Esta ayuda habría de ser su compañera sexual con lo que llegarían a ser “una sola carne” (Génesis 2.24). La expresión “una sola carne” refiere a la relación sexual e indica esta para el matrimonio. Ni antes ni fuera del mismo, y solo entre un hombre y una mujer.
El matrimonio es la relación establecida y ordenada por Dios antes de la caída en el pecado y que sobrevivió a la misma (Génesis 2.24-25). Leemos en Mateo 19.5: “Por esto el hombre dejará..., y se unirá”, esa es la orden del Señor. Es un pacto heterosexual entre un hombre y una mujer. “El hombre... se unirá a su mujer”,dice Mateo 19. Es una relación entre un solo hombre y una sola mujer. No es posible la poligamia ni la homosexualidad. Leemos, además, “el hombre dejará padre y madre”. Por lo tanto, el acto matrimonial es precedido por un evento público ya que el hombre y la mujer, de la misma manera, deja a los padres. Ese acto es consumado en la unión sexual. Así lo declara la Escritura, “y los dos serán una sola carne”. El resultado ha de ser la compañía constante y el apoyo mutuo,“así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó no lo separe el hombre” (Mateo 19.6). Por lo general, esta relación es bendecida por Dios con el don de los hijos.
Hay por lo menos cuatro pasajes bíblicos que se refieren a la homosexualidad en términos negativos. En Génesis 19.1-13 se habla de la corrupción sexual de Sodoma. En Levítico 18.22 y 20.13 se prohíbe la relación sexual de personas del mismo sexo. Romanos 1.18-32 presenta la decadencia de la sociedad en este sentido. 1 Corintios 6.9-10 y 1 Timoteo 1.8-11 contienen algunas referencias a prácticas homosexuales.
Por lo que creemos y sostenemos que la Biblia considera a la postura homosexual como una desviación de la norma de Dios y exhorta a las personas con tal orientación a abstenerse de prácticas y parejas homosexuales. Al mismo tiempo, como cristianos, debemos mostrar verdadero amor y gran compasión para con las personas involucradas, sabiendo que Dios Todopoderoso, por la obra de salvación realizada por Cristo, quiere y puede restaurarlas íntegramente. Dios rechaza y condena el pecado, pero, ama y restaura al pecador que se vuelve a él en fe en Cristo.

Redacción Rev. Arnildo Ikert. Mayo de 2010

Revisión: grupo de pastores y profesores de la I.E.L.A

martes, 22 de junio de 2010

El nuevo presidente de Colombia cuenta con evangélicos en su equipo de confianza

BOGOTA, (Mundo Cristiano/ ProtestanteDigital.com)

El candidato oficialista Juan Manuel Santos ganó el domingo pasado la presidencia de Colombia al derrotar en segunda vuelta al líder del Partido Verde, Antanas Mockus.
Santos llega a la presidencia con la votación más alta de la historia, 69% de los votos, frente a 28% de Mockus.
Sin embargo, se constató un aumento en el abstencionismo en el total de votos emitidos por los ciudadanos, ya que sólo 9.035.449 colombianos habían votado (hasta las 14.00) en todo el país. Esta cifra representa una disminución del 11,3% frente al número de votantes que había concurrido a las urnas (hasta la misma hora) de las últimas elecciones que se produjeron el pasado 30 de mayo.
Santos, de 58 años, miembro de una influyente familia vinculada con el periodismo y la política, había invitado a votar pese a la lluvia y los partidos del Campeonato Mundial de fútbol.
"Quiero invitarlos a que metamos un gol, pero un gol al abstencionismo, (...) porque ese es el mejor partido que podemos jugar, el partido por Colombia y por su futuro", declaró el candidato después de votar.
Pero al margen de la participación, la realidad es que Santos asumirá el poder con una sólida y amplia mayoría en el Congreso que le abre el camino para lograr la aprobación de importantes y decisivas reformas.
SANTOS SE RODEA DE CRISTIANOS
El pastor Héctor Pardo, Presidente de la Confederación de Libertad Religiosa, Conciencia y Culto y pastor de la iglesia “Tabernáculo de la Fe” dijo que “es importante resaltar que Santos está rodeado por políticos que han abrazado el cristianismo”.
Ricardo Arias, presidente del Partido de la U, es un cristiano evangélico comprometido y Rodrigo Rivera, su jefe de debate de campaña, político y exparlamentario, es también cristiano. “El candidato Santos lo llamó a su campaña justamente porque es evangélico. Así mismo su jefe de Prensa, Richard Fredy Muñoz, es también cristiano” dijo Pardo.
En opinión del pastor Pardo, “el hecho de que Juan Manuel Santos esté rodeado de un entorno cristiano le garantiza que estarán orando por él y le ayudarán a tomar decisiones sabias. Además con estas actitudes ha demostrado su respeto hacia la iglesia evangélica en Colombia, que es creyente y tiene temor de Dios”, puntualizó.

Fuente: Mundo Cristiano. Edición: ProtestanteDigital.com

lunes, 21 de junio de 2010

La iglesia XXX rescata a los adictos a la pornografía

Cristianos evangélicos de Estados Unidos proclaman que «Dios ama a las estrellas del porno».
Resulta paradójico vincular tres letras equis –sinómimo de pornografía– con la palabra inglesa «church», que en su traducción significa «iglesia».
Hace ocho años, el pastor evangélico Craig Gross fundó el ministerio cristiano «XXXChurch». Su objetivo era que Dios llegase a la gente que consume y trabaja en la industria de la pornografía. Con este fin, Gross y su equipo alquilaron un «stand» en una gran convención porno en Las Vegas en 2002. Desde entonces, no han parado de ir a festivales de cine para adultos a lo largo y ancho de los Estados Unidos.
Dios en la «ciudad del pecado»
Desde «XXXChurch» explican que no acuden a los festivales porno o a ciudades como Las Vegas –a la que definen como «Sin city», «ciudad del pecado»– para hacer una iglesia, sino «para ser Iglesia». Hablan de Dios con turistas y trabajadores de salas de striptease. «Queremos mostrar a Cristo a cada persona en Las Vegas, ya sea gente adinerada, turistas o recién casados», afirman.
Además de recorrer ciudades, este ministerio cristiano desarrolla su actividad en internet. Se definen como «el primer sitio web diseñado para crear conciencia y ayudar a los afectados por la pornografía». Una web que cuenta con testimonios en vídeo, textos y consejos, y en la que priman valores como el arrepentimiento, el orden o la comprensión.
Desde su creación, «XXXChurch» ha regalado miles de libros en cuya portada se puede leer la frase «Jesus Loves Porn Stars» –«Jesús ama a las estrellas del porno». Al abrirlo, la persona se encuentra con un ejemplar del Nuevo Testamento. Explican que no pretenden dar un sermón, sino entablar una conversación individual con aquellos que se acercan y ofrecerles una alternativa cristiana a su forma de vida. «Si usted está en la industria del porno o es adicto a ella, nosotros estamos aquí para ayudarle», indica Gross.
«Porno y pancakess»
Cada cierto tiempo organizan «Porn & Pancakes», que se puede traducir como «Porno y Tortitas».
Consiste en reunir un sábado por la mañana a hombres vinculados a las iglesias locales para tomar un desayuno y hablar sobre la adicción a la pornografía.
Durante el café y las tortitas, algunos oradores, como pastores evangélicos o ex productores de cine para adultos, hablan con los hombres acerca de cómo la pornografía afecta negativamente a sus vidas, incluyendo las relaciones con sus familias y con Dios.
Insisten en que solamente obedecen la misión que Cristo dejó a sus discipulos y que se puede leer en el Evangelio de San Mateo (Mt 28, 19): «Id y haced discípulos de todas las naciones».

Fuente: La Razón

domingo, 20 de junio de 2010

La unificación de las Iglesias Reformadas

Por. Cervantes-Ortiz, México*
En el espíritu de las palabras de Calvino en el sentido de que él hubiera sido capaz de recorrer diez mares para tratar de unificar a la Iglesia de Cristo, ha dado inicio en Grand Rapids, Michigan (EU) al Concilio de Unificación de las Iglesias Reformadas que dará lugar a la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (CMIR). Desde este viernes 18 y hasta el 26 de junio, están reunidos/as en dicha ciudad los representantes de la Alianza Reformada Mundial (ARM) y el Concilio Ecuménico Reformado (REC, por sus siglas en inglés). Se ha anunciado que en esta reunión participan unos 475 delegados y un número casi igual de observadores, invitados, visitantes y voluntarios.
El lema de esta gran reunión de unificación es “Unidad del Espíritu en el vínculo de la paz”, basado en Efesios 4, a propósito del cual, en el Instituto Global de Teología que se llevó a cabo un par de semanas antes del gran cónclave en Chicago, el profesor mexicano Mariano Ávila expuso los resultados de su investigación reciente.
En el número de junio-septiembre de 2008 de la revista Reformed World, el doctor Douwe Visser explicaba las razones para la elección de este texto: “No fue fácil encontrar el tema para el concilio de unificación en 2010 […] Los dos grandes puntos de la CMIR tenían que expresarse en el tema: el llamado a ser una comunión y a un pacto por la justicia. […] Este tema será la guía para preparar el concilio y para el concilio mismo. El contexto del pasaje de Efesios 4 es rico y útil para explicar el significado de sus palabras. Nos ayudará para desarrollar bien ambos llamados: a la communion y a la justicia”.
Como sucede en estos casos, se han realizado también las reuniones previas de teólogos jóvenes, mujeres y jóvenes, como preámbulo de la actividad principal, que culminará con el lanzamiento del nuevo organismo, cuyo nombre intenta reflejar el nuevo impulso por ofrecer un auténtico testimonio de unidad espiritual y de proyección de servicio. La reunión dio inicio con una celebración litúrgica pluricultural que no ignoró el hecho de que 73 delegados (latinoamericanos, asiáticos y africanos) no pudieron asistir debido a que el gobierno estadunidense les negó la visa por considerarlos como un riesgo de terrorismo o de migración ilegal.
Desde 2007, cuando se anunciaron los pasos dados por estas organizaciones para su unificación, comenzó un proceso de análisis en el que cada una de ellas, con sus énfasis de trabajo específicos, aportará una visión que aglutine a las iglesias miembros alrededor de proyectos específicos. La primera reunión de ambos comités se llevó a cabo en Utrecht, Holanda, en septiembre de 2008. Así, como bien lo señaló el doctor Setri Nyomi, secretario general de la ARM: “En la nueva organización, el término ´comunión´ hace referencia a un nuevo tipo de relaciones de trabajo. Como comunión, reconocemos nuestro bautismo común y el hecho de estar reunidos en torno a la mesa del Señor, lo cual hace que seamos mejores testigos y más eficaces a la hora de tener un impacto real en el mundo”.
Inspiradas en subtradiciones distintas, pero complementarias, el REC y la ARM llegan a esta reunión con la conciencia de la necesaria unidad, porque “si bien ambas comparten el compromiso de la Reforma con la tradición bíblica, el REC es conocido por hacer hincapié en el desarrollo espiritual y por su fidelidad a las confesiones (declaraciones de fe) de la iglesia, mientras que la ARM es conocida por sus tomas de posición en cuestiones tales como la justicia racial y de género, la protección medioambiental y el establecimiento de un orden económico mundial justo y equitativo”.
En ese sentido, el doctor Richard van Houten, secretario general del REC, ha dicho: “En estos tiempos de división y disensión en tantas esferas de nuestras vidas ?incluida la vida eclesial? es muy significativo que dos grupos mundiales de iglesias deseen establecer un nivel de unión más alto que nunca antes”. El personal de la CMIR seguirá trabajando en el Centro Ecuménico en Ginebra, Suiza, sede del Consejo Mundial de Iglesias.
Israel Flores Olmos, delegado de la Iglesia Evangélica Española, por su parte, escribe: “La histórica jornada que inició el día de hoy aprobó los acuerdos que permitirán la unión de la REC y la ARM. Dichos acuerdos que han ido preparando los comités ejecutivos de ambas organizaciones y que se han adoptado esta mañana constan de 10 puntos, en los que se rescata el espíritu de la tradición reformada, la herencia de Calvino, pero en especial hace una realidad en esta parte del cuerpo de Cristo de ser lo que el Señor quiso, ´que seamos uno´, lo que no implica dejar de lado los programas y los avances obtenidos por ambas organizaciones, pues al contrario, como lo dice en el punto 5, que desde hoy, 18 de junio de 2010, ´la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas será la continuación de estas dos organizaciones, unidas en identidad y función´”.
Flores Olmos agrega que en asuntos específicos y álgidos, la nueva organización, por ejemplo, “impulsará más activamente el papel en el liderazgo de la mujer en todos los ámbitos de la vida de las iglesias, promoviendo más activamente la ordenación de las mujeres y acompañando a las iglesias en donde aún no hay el reconocimiento a la ordenación y el acceso a los liderazgos de las mujeres”.
Los materiales preparatorios, entre los que destaca el titulado Ésta es nuestra familia (www.reformedchurches.org/docs/BibleStudy-EstaEsNuestraFamilia.pdf) insisten en la necesidad de aportar, desde la diversidad de la tradición reformada, insumos, prácticas e ideas que faciliten la presentación de un testimonio cristiano efectivo en medio de los grandes problemas del mundo actual. La mayor parte de los materiales se encuentran disponibles, en varios idiomas en el sitio: www.reformedchurches.org

*Cervantes-Ortiz es escritor, médico, teólogo y poeta mexicano.

Fuente: © L. Cervantes-Ortiz, ProtestanteDigital.com (España)

sábado, 19 de junio de 2010

Jeremías Identifica A Los Falsos Profetas, Maestros Y Pastores

Estudio de Les Thompson, EE.UU.

El tema para hoy es importante, porque nos da una orientación bíblica para cuidarnos de los falsos profetas, maestros, pastores y ahora apóstoles. Les Thompson, es un escritor prolijo, de teología bíblica sana. Nos comparte un estudio biblico del profeta Jeremías. Este libro bíblico "que más comentarios hace acerca de los falsos guías religiosos y sus palabras siguen siendo pertinentes el día de hoy". Dice Jeremías 23: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os alimentan con vanas esperanzas.
Espero que este artículo como nuestros muchos otros, incluyendo las metodologias para el quehacerteológico le sean de gran ayuda. En Cristo y América latina,
Ministerio TRANSFORMANDO VIDA

Desde las más tempranas edades los seguidores del Dios verdadero han tenido problemas con falsos profetas, maestros y pastores. La seria instrucción negativa y la severidad espiritual causadas por estos “ciegos guías de ciegos” (como los llamó Jesús), es que todos terminan
cayéndose “en el hoyo” (la destrucción eterna).
El escritor bíblico que más comentarios hace acerca de los falsos guías religiosos es Jeremías. Haremos, pues, un estudio de sus comentarios para familiarizarnos con lo que los falsos religiosos dicen, hacen y destruyen. Así podremos ver las similitudes con los modernos profetas, maestros y pastores falsos que hoy día igualmente trastornan las verdades de Dios y llevan al
pueblo al error.
Veremos que a través de su escrito, Jeremías dedica unos ochenta versículos para condenarlos. Para nuestro estudio tomaremos las citas principales y las analizaremos para conocer mucho mejor a estos perniciosos y falsos guías. Conociendo sus tácticas podremos con más facilidad identificar a los falsos profetas, maestros y pastores que hoy confunden, ciegan y destruyen espiritualmente al pueblo.
I. Jeremías 2:8 Los sacerdotes no dijeron: ¿Dónde está Jehová? y los que tenían la ley no me conocieron; y los pastores se rebelaron contra mí, y los profetas profetizaron en nombre de Baal, y anduvieron tras lo que no aprovecha. Jeremías identifica a sacerdotes, pastores y profetas que habían traicionado su llamado. Dios había asignado a estos tres grupos la tarea de revelar sus divinas verdades (Dt 33:10; Mal 2:7). Sin embargo, entre los fieles, se levantaron falsos imitadores que pretendían ser los mensajeros de Dios. A. En los días de Jeremías los “maestros”, es decir los levitas (los que habían sido llamados por Dios específicamente para enseñar su ley), ahora actuaban como si esa ley no existiera, e ignorándola, enseñaban lo que más les hacía aceptados y populares.
B. Los “pastores” (estos no solo representaban los líderes del templo sino también los dirigentes políticos) se rebelaron contra mí, dice el Señor. Esos falsos líderes no querían relacionarse con el verdadero Dios ni con sus verdades. Solo buscaban los beneficios que acompañan a aquellos que en verdad sirven a Dios. Pretendían ser de Dios, pero realmente eran unos mentirosos, lobos vestidos de ovejas. Se parecían a los liberales religiosos de nuestros días que piadosamente se declaran mensajeros de Dios, aunque niegan la veracidad de la Biblia, la eficacia de Jesucristo, y abiertamente apoyan los pecados que la Biblia condena.
C. Por su parte los “profetas” en los días de Jeremías (esta representa la tercera agrupación llamada por Dios para proclamar su mensaje) actuaban como aquellos que no conocen a Dios. Jeremías los acusa de profetizar “en nombre de Baal”... Clic aquí

viernes, 18 de junio de 2010

Embarazos «no deseados»

Por. Wenceslao Calvo, España*
Una expresión que tiene una envoltura neutral, pero cuyo contenido resulta espantoso, es ´embarazos no deseados´. Cuando la realidad es repugnante y es imposible despojarla de ese carácter perturbador, se hace imprescindible manejar el lenguaje para disfrazarla y presentarla como algo aceptable. Evidentemente la realidad sigue siendo la misma, haciendo falta solo un ejercicio de rigor para descubrir su verdadera faz.
Pero como ese rostro se ha maquillado y su fealdad insoportable ha quedado oculta bajo una capa artificial más amable, eso nos ayuda a que escojamos el rostro maquillado antes que arriesgarnos a encontrar algo miserable, lo cual nos pondría en la incómoda posición de tener que rechazarlo. Y así es como los impulsores del lenguaje manipulador encuentran un aliado en nuestra propia inclinación de preferir antes la mentira agradable que la verdad desagradable.
El lenguaje debería ser expresión de la realidad objetiva, lo cual significaría que solo hay una manera posible de nombrar a las cosas, ya que su esencia es una. Eso es lo que en expresión popular se denomina ´llamar a las cosas por su nombre´. Ahora bien, si el nombre representa la esencia de algo, entonces la expresión popular no va descaminada, porque significa que la palabra que contiene el nombre es reflejo de la realidad.
Pero como esa realidad es interpretada por un sujeto que la analiza y la entiende de determinada forma, no siempre con intención recta, es por lo que una sola realidad puede ser denominada de maneras totalmente dispares. Si además ese sujeto dispone de los resortes del poder para difundir masivamente su peculiar interpretación de la realidad, entonces ya tenemos todos los ingredientes para que se pueda dar esa manipulación del lenguaje a gran escala que hace veintiocho siglos denunciara el profeta Isaías(1).
A estas alturas de la película ya nos hemos dado cuenta de que maquillar la realidad no es exclusivo de las dictaduras, sino que en democracia también se hace para vendernos lo impresentable. Después de todo ese maquillaje es parte integral de nuestra sociedad, cuya devoción por la imagen ha elevado al Photoshop al rango de herramienta imprescindible para trastocar lo realmente imperfecto y hacerlo virtualmente perfecto; aunque como la imagen no es más que la apariencia, lo que en verdad se cambia no es lo esencial sino solo lo secundario. Lo mismo ocurre con el lenguaje manipulador: modifica la apariencia, pero no la esencia, si bien los que viven de apariencias lo necesitan desesperadamente para engañar y seguir engañándose.
La expresión ´embarazos no deseados´ entraría de lleno en esa clase de lenguaje fraudulento, propio de quien pretende escamotear la realidad disfrazándola. Alude a una selección arbitraria, no reglamentada más que por el deseo privado, para discriminar qué seres humanos pueden sobrepasar determinadas fases de la existencia y llegar a otras. Al poner al arbitrio de cada cual esa selección se establece el principio de que tales seres están sin ninguna garantía jurídica, algo que evidentemente deja a la criatura por nacer en una posición de vulnerabilidad total. Depende totalmente de la voluntad particular si seguirá existiendo o será aniquilada.
El Estado, que podría legislar para regular esa voluntad particular, se ha pronunciado legislando que esa voluntad sea soberana. Es decir, que nos encontramos en una esfera en la que la legalidad se caracteriza por lo que quiera hacer la persona. Sea cual sea esa voluntad, la legalidad está garantizada, tanto si es a favor de la vida de la criatura como si es en pro de su muerte.
Ahora bien, una legalidad que sitúa en el mismo plano la vida y la muerte y las hace depender del arbitrio particular es una legalidad injusta. Porque ése es precisamente el principio sobre el que están sustentados los regímenes autocráticos, en los que una persona determina el destino de otros basándose nada más que en su propia voluntad, que tiene fuerza legal.
Llegamos así a la conclusión de que el aborto libre no es más que la consagración legal de un régimen autocrático de la mujer durante un determinado periodo de tiempo. Si esa autocracia es buena la criatura saldrá adelante, de lo contrario su destino será la muerte. Y nadie más puede interferir, habiendo sido tal estado de cosas aprobado legalmente en democracia; lo cual nos lleva a otra conclusión: La democracia, que por su propia naturaleza es antagonista de toda dictadura, ha dado a luz una dictadura a la que ha dado carta de legitimidad, algo que pone bajo sospecha a la democracia misma por la contradicción que ello supone.
Todo esto desemboca en otra deducción: No todo lo que numéricamente alcanza una mayoría de votos es necesariamente justo, y puede que ni siquiera democrático, aunque en razón de la aritmética sea legal. Algo puede ser legal y no ser justo. Si el principio de arbitrariedad no es justo nunca -pues si afirmáramos que alguna vez lo es tendríamos que admitir que hay dictaduras buenas y dictaduras malas- tampoco pude serlo en el caso del aborto libre.
Así pues, tras la expresión ´embarazos no deseados´ palpita una monstruosidad que no nos hace muy diferentes de otros a quienes condenamos sin paliativos, porque ¿cuál es la diferencia ética entre los ´embarazos no deseados´ de una democracia y los ´ciudadanos no deseados´ de una dictadura?

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1) Isaías 5:20

* Wenceslao Calvo es conferenciante, predicador y pastor en una iglesia de Madrid

Fuente: © W. Calvo, ProtestanteDigital.com (España)

jueves, 17 de junio de 2010

La compasión suple lo que le falta a la teología

Por Juan Stam, Costa Rica

Lo que hace posible una misión de amor genuino, al estilo de Cristo, es la compasión. Cuando no hay compasión, podemos tener dinero para llevar a cabo programas de acción social y (tal vez) una ideología para motivarnos y darnos sueños de un nuevo mundo, pero entonces nuestra misión no es al estilo de Jesús.
Siempre ha habido cristianos que tienen una teología muy “progresista” pero que no viven de acuerdo con ella. Su teología es muy idealista, pero su vida práctica no refleja lo que ella dice. Sin embargo, también pasa lo contrario: hay cristianos cuya teología deja mucho que desear, pero cuya vida práctica nos sorprende: es una vida motivada por la compasión, una vida de servicio en respuesta a las necesidades del prójimo, de preocupación por los niños, de identificación con los pobres, de voluntad de hacer todo lo posible para cambiar la situación de las personas más vulnerables de la sociedad. Se diría que la compasión suple lo que le falta a la teología.
Una temática constante en la mayoría de las grandes conferencias organizadas por gente evangélica, en las últimas tres décadas, es la responsabilidad de los cristianos frente a las necesidades sociales, políticas y económicas de nuestros pueblos. Lo que hoy día estamos viendo es en gran medida el resultado, no solamente de esos congresos o reuniones, sino de toda una labor teológica y pedagógica, conjugada con el serio agravamiento de la situación, que exige a muchos a tomar conciencia de que no es posible seguir predicando un evangelio desencarnado de la realidad.
Hasta muy recientemente mucha de la evangelización de las iglesias evangélicas era desencarnada. Se orientaba a la salvación del alma pero pasaba por alto las necesidades del cuerpo. Ofrecía la reconciliación por medio de Jesucristo, pero dejaba de lado la reconciliación del hombre con su prójimo, basada en el mismo sacrificio de Jesucristo. Proclamaba la justificación por la fe, pero omitía toda referencia a la justicia social enraizada en el amor de Dios por los pobres.
Frecuentemente este énfasis estaba vinculado a otro, muy grande, en el crecimiento numérico de la Iglesia. A cuenta de incrementar el número de miembros en las filas evangélicas, se caía en la reducción del Evangelio, haciendo de éste un mensaje para el individuo pero no para la sociedad, para la vida privada pero no para la pública. Muchas iglesias no han superado todavía estas distorsiones, y las controversias les impiden participar creativamente en lo que Dios quiere hacer en el mundo para cumplir su propósito redentor. Sin embargo, hoy abundan casos de ministerio integral que muestran un cambio radical que se está dando en el pueblo evangélico latinoamericano en lo que atañe a la manera de encarar su ministerio. Son señales que apuntan a un nuevo día en la historia de la Iglesia evangélica en América Latina. Y lo que hace posible esas señales no es otra cosa que la compasión.
Fuente: Fundación Kairós.

miércoles, 16 de junio de 2010

España: nueva Ley de Libertad religiosa

La Dirección de Protestante Digital
El contenido del borrador de la nueva Ley de Libertad religiosa española ha sido publicado este pasado domingo en el diario El País. Un borrador no es un documento definitivo, pero poco variará, salvo sorpresas que siempre son posibles en lo que es un proceso dinámico y vivo hasta completarse.
Podríamos resaltar en este borrador dos aspectos. Uno, lo que el borrador contiene en lo publicado por El País. Coincide con muchas de las solicitudes realizadas ya no sólo desde este diario online, sino también de lo que la Alianza Evangélica Española y la FEREDE (Federación de Entidades Evangélicas de España) han expuesto.
En este primer punto poco hay que objetar a lo publicado, y sí mucho en lo que coincidir. En los aspectos principales, que por fin los funerales de Estado no sean monoconfesionales sino civiles (salvo que la familia directa del fallecido lo solicite acorde a su fe), que la presencia de las autoridades en actos religiosos se realicen con igualdad de trato para todas las confesiones, y que el Ejército no “rinda culto” oficial y obligatorio en actos católicos.
No era una reivindicación expresa del colectivo protestante, pero si existe coincidencia de posturas en cuanto a la ausencia de símbolos religiosos en el espacio público (salvo los culturales y patrimoniales), respetando a la vez el uso de símbolos religiosos en la indumentaria personal (mientras no contravenga la legislación vigente, se entiende).
Un sólo pero: la limitación a la objeción de conciencia, que se ciñe a que se objete dentro de lo que las leyes permiten objetar ¿Y si las leyes impiden objetar en una cuestión que actualmente no está legislada? Para eso está precisamente la objeción, para desobedecer en conciencia lo que a nivel personal se considera inadmisible y la ley nos impone.
En su conjunto, creemos que estas medidas de la nueva Ley suponen una posición neutral del Estado, un equilibrio entre no creyentes y creyentes de todas las confesiones, favoreciendo una convivencia plural, sin que ninguna confesión sea discriminada ni se le otorguen privilegios “especiales”; siendo a la vez respetuosa con las creencias personales y su expresión pública como tales.
Sin embargo, la mayor pega es hacia lo que no aparece: la financiación de las confesiones. Los ciudadanos españoles somos (deberíamos ser) iguales ante la ley, y un grupo de ciudadanos no deberían poder destinar parte de su tributo a Hacienda a determinadas instituciones simplemente por ser de una determinada religión. Sí pueden las instituciones religiosas recibir dinero público, como cualquier ONG, por proyectos concretos que supongan un bien social o cultural; y en este sentido la Fundación Pluralismo y Convivencia ha demostrado ser un cauce objetivo y adecuado.
Que las instituciones reciban directamente dinero del Estado supone además de lo dicho convertir al Estado en recaudador de esa confesión religiosa, y crear relaciones de dependencia no deseables. Pero por encima de todo es negar a la persona que es ella -y sólo ella- la receptora de los derechos de la libertad religiosa; siendo ella -y sólo ella- quien debe decidir cómo destinar su apoyo económico, si es que quiere hacerlo. No debe ser la institución la que ejerza y disfrute tal derecho.
Un método sencillo y correcto para ejercer este derecho individual sería a través de la declaración del IRPF, aumentando el límite de la cantidad deducible de las ofrendas o donativos a las entidades religiosas en un porcentaje mayor al que ahora se realiza (es decir aumentar el porcentaje de la base imponible para que pueda deducirse un mayor importe total, como se hace con los donativos a las Fundaciones).
Así, un católico puede decidir si su donativo lo da a la Conferencia Episcopal, o a Cáritas, o a otra entidad. En cualquier caso, lo que el Estado hace es reconocerle el derecho de desgravar el dinero que da altruistamente. De esta manera, el derecho es de la persona, el Estado en nada interviene (salvo en reconocer la desgravación que le corresponde), y las instituciones religiosas se autofinanciarían con la ayuda añadida de que los donativos que reciben se incrementarían al poder ser desgravados por sus donantes.
Todo esto no es nuevo. Ya en el informe del Observatorio Cívico Independiente (OCI) vinculado a la Alianza Evangélica Española, en su informe de 2006 sobre Libertad Religiosa en España se recogían todos estos puntos. En su momento nos solidarizamos con este informe, y volvemos a hacerlo. Es bueno ver que las opiniones no cambian de dirección con el tempo, porque hablan de rigor y fiabilidad.


Redacción es la Dirección de Protestante Digital


Fuente: © Protestante Digital, 2010, España.

martes, 15 de junio de 2010

Futbolistas cristianos manifiestan públicamente en el Mundial su fe

Su talento les ha llevado a lo más alto de la competición: disputar un mundial. Viven el sueño que muchos quisieran cumplir y lo agradecen a Dios. Los brasileños Kaká y Lucio, el centrocampista paraguayo Jonathan Santana, o Vincent Enyeama, el portero nigeriano que amargó el debut de Messi, hablan de su fe sin tapujos. Aunque la FIFA no les deje manifestarlo en el terreno de juego, su testimonio sale a la luz.
En el caso de Jonathan Santana, su historia va más allá del triunfo deportivo. «Dios me salvó, hizo un milagro», asegura el centrocampista que en 2002 estuvo en estado crítico tras ser tiroteado en Argentina. Ocho años después, forma parte del plantel paraguayo que participa en la copa del mundo en Sudáfrica.
A su compañero Cabañas le pasó algo parecido hace poco. Y como el delantero, Santana pudo seguir vivo para contarlo, volver a jugar al fútbol y debutar ante Italia en un Mundial. Y todo gracias a una intervención divina, a la ayuda de Dios. «Él me salvó», asegura, haciendo gala de una fe que impregna todas las facetas de su vida.
ESQUIVÓ LA MUERTE... Y DA GRACIAS A DIOS
Nacido en Buenos Aires hace 28 años, Santana comenzó su relación con el balón a los ocho años en el club General Paz del barrio porteño de Mataderos. Se formó en las categorías inferiores del San Telmo, pasó al Almagro y en 2001, a los 19 años, debutó en la Primera División argentina.
La vida le sonreía, aunque todo estuvo a punto de truncarse el 3 de febrero de 2002. Aquella jornada, Santana se dirigía a Ezeiza, a un entrenamiento de su equipo, por la autopista 25 de mayo en un Renault Megane que conducía su padrastro cuando, a la altura de Villa Solati, un Twingo se colocó a su par y dos desconocidos le dispararon tres balazos del calibre 22. El futbolista recibió el impacto de dos proyectiles, uno en el hombro y otro en el cuello, por lo que tuvo que ingresar en el hospital en estado crítico. Allí fue sometido a una traqueotomía de urgencia y a una intervención quirúrgica que acabaron salvándole la vida.
Su evolución fue satisfactoria y, de forma increíble, seis meses después Santana volvió a vestirse de corto con el San Lorenzo de Almagro. Posteriormente pasó a River Plate y actualmente milita en el Wolfsburgo, una carrera notable que, después de obtener la nacionalidad paraguaya en 2007, le ha permitido alcanzar la condición de mundialista.
El centrocampista recuerda todavía aquel episodio trágico que a punto estuvo de terminar con su vida y no duda en reconocer, debido a su profunda religiosidad, que la intervención divina fue fundamental en su salvación. «Yo ya había aceptado a Cristo en mi corazón mucho antes de aquel episodio, aunque admito que me sirvió para afianzarme en mis creencias y poder superar ese mal momento. Soy muy creyente. Entiendo perfectamente que para aquél que no conoce a Dios esta frase resulte chocante, pero yo viví muchas cosas en las que él me ha mostrado que tiene fidelidad. Yo soy cristiano, pero lo mío es una forma de vida y sé que Dios tuvo mucho que ver en que yo me salvara aquel día. Después de aquel capítulo de mi vida conocí mucho más a Dios. Me di cuenta de que no consiste sólo en leer la Biblia, sino en tomarle como un amigo», relata.
Su fe es conocida en Sudamérica desde hace muchos años. Durante su periplo en River Plate, Santana lideró junto a Radamel Falcao, actual delantero del Oporto, un grupo que algunos bautizaron como La banda de Dios y en el que varios futbolistas se reunían en una iglesia para orar, leer la Biblia y relatar sus experiencias personales. El paraguayo reconoce que cada vez que sale a jugar pide a Dios que le proteja, pero admite que «tengo claro que él no siente predilección por ninguna camiseta de fútbol, por lo que la oración la aplico más en mi vida personal».
Nueve años después de ver de cerca la muerte, Santana sigue teniendo claro que fue la intervención divina la que hoy le permitirá debutar en un Mundial (ayer, ante Italia). «Es por su amor por lo que yo vivo y quiero vivir. Y ese amor es para todo el mundo, no hay excepción. Por eso hay que tomar una decisión en la vida y veces humillarse ante Dios. Él siempre nos va a estar esperando con los brazos abiertos».
ENYEAMA, LA «MANO DE DIOS» ANTE MESSI
El portero nigeriano Vincent Enyeama no pudo disfrutar plenamente en su primer partido del Mundial. A pesar de ser designado el mejor jugador durante los 90 minutos, su equipo perdió ante la poderosa selección argentina. Sin embargo, si alguien evitó una goleada fue Enyeama, que evitó en varias ocasiones el gol de Messi, Higuaín o Tévez.
«Mi secreto es Dios», afirmó el portero. «Creo mucho en Dios y él marcó la diferencia. Dios es mi secreto. Me tranquiliza», insistió. Enyeama tapó cuatro tiros con destino de red nada menos que a Messi y dos a Higuaín. Despejó balones que buscaban rincones lejanos y también ganó un par de mano a mano.
El portero, quien milita en el Hapoel israelí desde el 2007 y juega en la selección desde el 2002, dijo que le atrapó tantos balones a Messi porque vio «varios partidos de la liga española, pero sobre todo por la gracia de Dios».
FRANCO, SELECCIÓN DE MÉXICO
Como una bendición de Dios, así calificó el delantero de la Selección Mexicana, Guillermo Franco, el hecho de poder jugar la inauguración del Mundial de Sudáfrica 2010.
«Es una bendición de Dios, no todo el mundo tiene la posibilidad de inaugurar un Mundial, somos concientes de los millones que presenciaron el juego. Más allá de los grandes nombres y de las personalidades, para nosotros es una bendición de Dios el hecho de ser los escogidos para poder inaugurar una Copa del Mundo», mencionó el atacante.
Esta es la segunda Copa Mundial de la FIFA para el delantero del West Ham United tras su participación con el Tricolor en Alemania 2006. Franco es reconocido como un cristiano comprometido. Durante la celebración del campeonato de la selección mexicana en la Copa de oro 2009 al Guille Franco, mostraba con convicción una camiseta con la frase «I Love Jesus», «Yo amo a Jesús».
«THE PRIZE» EN TODO EL MUNDO
El documental «The prize» es una historia de 30 minutos sobre seis futbolistas que esperan disputar la copa del mundo con el deseo de ganarla. Las historias de Lucio o Kaká se encuentran entre ellas. El documental narra cómo estos jugadores descubrieron que el verdadero premio no se encuentra en un balón o en un juego, sino en una nueva vida que sólo puede ser obtenida en relación con Jesucristo.
El documental ya se está emitiendo en varios países, además de ser repartido en clubs, colegios y otras entidades deportivas. Los DVDs del documental han sido traducidos a 49 idiomas.

Fuente: Asociated Press, Mundo Cristiano. Edición: ProtestanteDigital.com